sábado, 17 de octubre de 2015

HISTORIA DE COMO RAMANA Y ROBERT ADAMS ME ENCONTRARON



HISTORIA DE COMO RAMANA Y ROBERT ADAMS ME ENCONTRARON
Recuerdo un momento, yo debía tener 12 años y estaba leyendo una enciclopedia (lo se.. yo era un niño muy raro). De repente tuve la impresión de que el mundo en el que estaba viviendo y acerca del cual estaba leyendo no era real, sino algo creado por mi mente. No fue un pensamiento, fue una profunda sensación dentro de mi cuerpo. Me asuste mucho y trate de desestimar esa percepción, pensando que algo malo me estaba pasando. La sensación se disipo pero mi vida había cambiado.
A los 18 años y después de un par de años involucrado en política, estaba muy descontento y empecé a buscar formas de entender el mundo, en vez de tratar de cambiarlo. En aquel momento yo vivía en Caracas. Un amigo me hablo de una casa, cerca de mi escuela, donde se estaba empezando a formar un grupo. Había actividades interesantes: teatro, fotografía, serigrafía, etc. Y lo mas importante para mi en ese momento... chicas lindas. Este grupo, llamado «Sintesis» tenia como líder a un señor de mas edad que se rumoreaba había estado en la India. Él a veces hablaba de un santo llamado Ramana Mahrshi. Un día un libro sobre Ramana callo en mis manos. No recuerdo el nombre del libro, pero leyendo su complicada prosa, tuve la impresión de que Ramana me estaba hablando de aquella percepción que tuve a los 12 años.
Varios meses después descubrí que aquel hombre mayor, el líder del grupo, practicaba sexo con las jovencitas del grupo, como una especie de ritual de iniciación. Una de sus víctimas fue una niña de 14 años de la cual yo estaba loca y platónicamente enamorado. Me enfade mucho, deje el grupo y desestime todo lo que había aprendido en esos mese como un fraude, incluyendo las enseñanzas de Ramana.
Pasaron varios años en los que estuve concentrado en aprender mi profesión y comenzar mi carrera. Soy cineasta y fotógrafo. Viví en Inglaterra, Suecia, España y finalmente termine en California. Casado, después divorciado, con dos estupendos hijos y al frente de una exitosa productoras de cine que me proporcionaba una vida de abundancia. Pero, dentro de mi, aquella percepción que tuve a los 12 años empezaba a agitarse y amenazaba con cambiar mi vida de nuevo.
En 1992 estaba involucrado en un romance con una bella actriz y modelo que practicaba lo que se llama el «Método Sedona». Me empezó a interesar cuando me enteré que el creador del «Método Sedona», Lester Levenson, basaba sus enseñanzas en las de Ramana.. Aquí estamos otra vez!... Ramana esta llamando a mi puerta. Me integré en el grupo, iba a seminarios, retiros y todas las actividades con la esperanza de conocer a ese Lester Levenson, considerado como una persona «realizada» (Jnani). Y no sabia lo que era una persona «Realizada», pero sentía que conocerlo era algo importante. La salud de Lester iba menguando, prácticamente no salia de su casa en Phoenix (Arizona) y nunca se acerco a Sedona, así que nunca, para mi frustración, llegué a conocerlo.
En 1994 Lester muere y es enterrado en una humilde tumba sin marcar en los terrenos del «Instituto Sedona». Yo estaba muy frustrado, el «Método Sedona» me estaba ayudando pero yo quería mas y creía que conocer a Lester era la clave. Ahora ya no estaba, el único Jnani del que yo tenia noticias se había ido y mi frustración iba en aumento. Un día, no recuerdo como, me encontré conduciendo mi coche hacia Sedona, llegue al Instituto Sedona y me dirigí a la tumba de Lester, un pequeño montículo de tierra en medio del desierto. En un tono de voz que no dejaba duda de mi cabreo le increpe diciendo -Tu me metiste en esta búsqueda y ahora no me vas a dejar, te exijo que hagas algo- No sucedió nada, así que me monte en mi coche y me dirigí de vuelta a Los Ángeles, con un inmenso enfado.
Dos semanas después , mientras trabajaba en mi oficina, recibo una extraña llamada. Una señora, que me conocía de los seminarios en Sedona, llamaba para preguntarme la dirección de mi Gurú Robert Adams. Le explique que yo no tenia ningún Gurú y no sabia quien era Robert Adams. Ella me insistía que alguien le había dicho que Robert era mi Gurú y que quería su dirección y teléfono. Finalmente la convencí de que no tenia idea quien era Robert, le pedí excusas por el malentendido y cuando iba a colgar el teléfono se me ocurrió decirle -sigue buscándolo y cuando lo encuentres por favor llamarme. Yo también quiero conocerlo-.
Dos o tres días después me llamo con la dirección del sitio donde Robert daba Satsang cada jueves y domingo. El domingo siguiente estaba yo allí, sin saber lo que era Satsang o que esperar de eso. Así fue como Robert me encontró. De la señora... nunca volví a tener noticias de ella.
Para mi sorpresa el sitio estaba a 15 minutos de mi casa en el Valle de San Fernando. Que conveniente! Llegue a la casa y me senté en el suelo rodeado de unos 25 devotos, escuchando una preciosa música (después supe que Robert amaba la música). Después de un rato en silencio Robert comenzó a hablar, pero yo no podía entender nada de lo que decía. Yo estaba muy relajado y, a pesar de no entender nada, no me sentía decepcionado en absoluto. Después de unos 20 minutos de charla, llego el momento para que la gente hiciera preguntas, Robert contestaba pero yo seguía sin entender, todo el mundo a mi alrededor reía y disfrutaba, después compartimos comida, que algunos de los devotos había traído. Todos parecían conocerse y yo me sentía aceptado, incluso creo que Robert me miro un par de veces. Cuando el Satsang termino me levante del suelo pero me quede en el mismo sitio, Robert salio de baño y camino directo hacia mí, me miro un largo rato, con sus preciosos ojos azules, después me abrazó y se dirigió hacia la puerta rodeado de gente que le despedía.
Fue una experiencia muy placentera pero no sucedió nada fuera de lo ordinario, excepto por el hecho de que se hubiera fijado en mí. Seguí mi vida normalmente por los siguientes dos o tres días. Hasta que, estando en casa de mi novia, viendo un partido de campeonato del mundo de fútbol, de pronto una oleada de felicidad se apodero de mi. Nunca había sentido tal éxtasis y felicidad y lo extraño era que se producía sin ningún motivo. Venia de dentro de mí y no me lo había producido ningún evento o placer. Puro, absoluto gozo sin ninguna causa se estaba apoderando de mi y se sentía normal y natural.
Desde ese momento empecé a ir a Satsang cada jueves y domingo, la presencia de Robert -sus emanaciones como lo llamaba Ed Muzica- se trasfería a mi vida diaria. Seguía un poco preocupado por no poder entender lo que Robert nos decía, así que, al final de un Satsang, me arrodille frente a él y le dije -Robert, no puedo entender nada de lo que dices- Me miro y con una amorosa sonrisa me dijo -Bieeeeen- mi preocupación desapareció por completo y simplemente me sentaba a sus pies, en silencio, hasta que se marcho a Sedona en 1996.
Lo vi por ultima vez cuando fue a Los Ángeles a hacerse una prótesis dental. Hubo Satsang en una casa distinta, al terminar vino hacia mi, puso su dedo en mi corazón y me dijo -Nunca te abandonare- En ese momento supe que no volvería a verlo. La foto que incluyo es de ese día, Robert estaba muy orgulloso de sus nuevos dientes.

Luis de Santiago

2 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  2. Testimonios de que Robert Adams fue un fraude:

    Steven Strouth:
    https://selfreflexiveloopphotography.photo.blog/2020/02/10/the-mystery-of-robert-adams-did-he-really-meet-ramana-maharshi-and-the-sages-of-india/
    https://selfreflexiveloopphotography.photo.blog/2020/05/17/was-robert-adams-really-in-india-part-2/


    Kitty Osborne:
    https://selfreflexiveloopphotography.photo.blog/2020/08/03/the-question-of-integrity/
    https://selfreflexiveloopphotography.photo.blog/2020/08/12/questions-for-kitty-osborne/
    https://www.devipress.com/robert_adams.html

    Michael James:
    https://happinessofbeing.blogspot.com/2019/11/ego-seems-to-exist-only-when-we-look.html?showComment=1573998920750&m=1#c3892563125636342773

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